lunes, 23 de noviembre de 2009

e) El color como elemento Paralingüístico.


A veces, los colores pueden cumplir una función paralingüística, pero también pueden ser simbólicos o semióticos en un sentido no lingüístico. Los logotipos son un ejemplo de explotación paralingüística del color y de otros parámetros de las letras (tamaño, tipo, etc.) y las artes gráficas cruzan muchas veces la frontera entre lo paralingüístico y lo puramente icónico. A continuación, os mostramos una serie de ejemplos en los que podremos diferenciar si se aplica el color con un sentido paralingüístico o no.

** El azul característico de IBM es parte de su logotipo y es el color de la compañía. En este caso sí es un elemento paralingüístico porque sirve para la interpretación del signo lingüístico donde se halla, esto es, se asocian las letras IBM en color azul con la empresa no se las vincula a otra cosa o nos las tomamos como simples letras.
Coca-cola se reconoce por escribirse con blanco sobre rojo y con un tipo de letra muy característico.

xx El azul se usa a menudo para otro caso totalmente distinto: el de los hipertextos, para indicar que se puede «clicar» sobre el azul para trasladarse a otra parte del hipertexto, pero a diferencia del caso de IBM, por ejemplo, no es paralingüístico porque no sirve para la interpretación del signo lingüístico donde se halla: no se interpreta una palabra de manera diferente por ir o dejar de ir resaltado en azul.

Una característica de los elementos paralingüísticos es que siempre acompañan cualquier comunicación verbal, igual que los factores contextuales y situacionales.